Se ha celebrado un tentadero en la ganadería Bella Lucía, propiedad del ganadero y banderillero Julián Carpio, en la localidad madrileña de Fuentidueña de Tajo, cuyo protagonista ha sido el novillero Carlos Aranda. El motivo ha sido probarse después de una operación de una hernia inguinal para ver cómo se encontraba física y mentalmente. Ha lidiado una becerrita con muchos pitones y buena bravura. Posteriormente lidia un utrerito muy encastado, pero le hubiese hecho falta un puyazo. Estuvo muy bien con ambos, y gracias a Dios pudo disfrutar del talento que lleva dentro.
Fotos: Bartolomé Bernal
Fuente: Burladero.tv
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